1.1.1
Propósito de formación del Programa
Antes de plantear los propósitos de formación del programa,
es importante explicitar que, en consonancia que las apuestas nacionales y
latinoamericanas, la Facultad de Ciencias de la Educación le apuesta a los
procesos de calidad en la formación de maestros en general, y a la calidad en
la Enseñanza de la Educación Religiosa, particular. Lo anterior, dispone al
colectivo académico adscrito al programa a considerar los tres ámbitos desde
los cuales se puede comprender y significar el área: la educación religiosa
como área de formación, la educación religiosa como área de estudio, y la
educación religiosa como misión eclesial.
El primer ámbito nos ubica frente a la trascendencia del ser
humano y la búsqueda permanente del Creador como fuente de inspiración y de
sentido. El segundo ámbito, expone los procesos y métodos propios para
enseñanza y aprendizaje coherentes con la fe que se profesa. El tercero, se
refiere a la misión evangelizadora de la Iglesia y, dentro de ella, de la
educación religiosa. Los tres ámbitos le plantean retos de calidad al área y
disponen para el entrecruzamiento curricular desde aspectos como: el fenómeno
religioso, la pedagogía y la evangelización.
Ahora bien, la Universidad, siendo respetuosa de las demás
religiones y disponiendo de todas las estrategias necesarias para que se dé el
diálogo ecuménico e interreligioso, es clara en la opción de una educación
religiosa cristiano – católica que le apuesta a la formación de la persona como
ser humano y como hijo de Dios. Por lo cual la ERE no se entiende como un área
más de las obligatorias y fundamentales, sino que es un pilar medular para la
formación de la persona, desde donde fortalece su filiación divina, resignifica
su relación con el trascendente y de-construye las comprensiones y el diálogo
entre fe – cultura, fe – razón, fe – vida.
En esta lógica, se establecen como propósitos formativos
para el programa contribuir para que sus profesionales hagan del vínculo
formación pedagógica - formación disciplinar - formación investigativa, una
apuesta crítica y propositiva con relación a su propio desarrollo, el de la
región y el país. Lo que hace que nuestros objetivos principales se encuentre
en el orden de: el establecimiento de los fundamentos éticos, morales,
políticos y sociales que hacen de los Licenciados Educación Religiosa Escolar,
seres humanos comprometidos con el conocimiento al servicio de la comunidad, la
región y el país; la promoción de la formación de maestros en Educación
Religiosa Escolar que, a su vez, sean autocríticos, participen en comunidades
académicas e investigativas y atiendan las cualidades de los contextos de
interacción; el liderazgo de procesos de gestión educativa en escenarios escolares, para la atención de
los niveles de educación formal y de educación para el desarrollo humano y
social.
Lo anterior se expresa en aspectos, como:
- El desarrollo de competencias para el ejercicio
de la profesión docente que permita la proyección de un profesional integral en
el cuidar, educar, gestionar e investigar.
- La potenciación del pensamiento crítico y
analítico, de tal manera que esté en capacidad de implementar los cambios y
asumir los retos y desafíos que el Sistema Educativo y la sociedad le propone al
Licenciado en Educación Religiosa Escolar.
- La formación de profesionales en la región, con
el fin de asumir el desafío que ésta requiere para la consolidación y
crecimiento del sistema educativo.
- El fortalecimiento de la proyección social de la
Universidad Católica de Oriente en la Región con la formación de profesionales
de la educación con calidad.
- La toma de conciencia de la propia identidad
religiosa, el respeto y reconocimiento de las identidades distintas de aquellas
que se posee
- La apertura al conocimiento mutuo ecuménico e
interreligioso, comprendiendo las razones y vivencias del creyente y del no
creyente, y la educación para el respeto mutuo
- El aprendizaje de métodos y procedimientos para
interpretar la experiencia religiosa, descubrir el sentido y el valor de las
vivencias religiosas, sus símbolos, documentos, acontecimientos y su doctrina.
- De otra parte, y de conformidad con la
Conferencia Episcopal de Colombia, el fomento del discernimiento y la
compresión de opciones religiosas libres y maduras, la interpretación cristiana
del hecho religioso y sus realizaciones, la educación para la convivencia y el
respeto de los valores religiosos, la proposición de una orientación ética de
la vida, y el acercamiento sistemático y orgánico sobre el fenómeno religioso
como experiencia humana y social
El proceso Enseñanza - aprendizaje se manifiesta a través de
numerosos fenómenos cuya frecuencia e intensidad varían con las
transformaciones del entorno ocurridas con el paso del tiempo, las
características del medio ambiente, de las clases sociales, de los grupos de
población y de las transformaciones económicas como resultado de la
globalización del mercado. Comprender y explicar la situación educativa
individual o colectiva es una contribución importante en el desarrollo de
propuestas para el mejoramiento, conservación y fomento de la educación, desde
los diferentes enfoques de las disciplinas.
La profesión de Educador, concibe al hombre en sus
dimensiones: biológica, síquica, social y espiritual en interacción con el
medio ambiente, actuando dentro del contexto global y ecológico. Teniendo en
cuenta que la Licenciatura en Educación Religiosa Escolar es un programa de
formación de maestros, se considera de gran importancia realizar algunas
reflexiones que tocan la esencia e identidad del maestro de educación religiosa
escolar.
Este debe ser un maestro que esté en la capacidad de entrar
en diálogo con diferentes opciones religiosas, que esté comprometido con la
formación integral de los escolares y que potencie la dimensión religiosa de
los estudiantes, debe ser un maestro que enseña con el ejemplo y que vive lo
que enseña, comprometido con todas las dinámicas y procesos propios de la
institución educativa, además que se identifica con las apuestas de la
educación de calidad, debe ser un mediador de la cultura, orientador de los
diálogos que establecen los jóvenes con los contextos, los saberes y los
conocimientos religiosos.
El currículo del programa de la Licenciatura en Educación
Religiosa Escolar tiene una estructura flexible, adaptada al entorno y a sus
requerimientos, responde además a las necesidades de formación y a los desafíos
que les imponen a los profesionales las instituciones educativas y las
necesidades de las comunidades académicas.
Teniendo en cuenta que la docencia en Educación Religiosa
debe mantener una posición de análisis crítico frente a los conocimientos
científicos que le aportan las ciencias exactas y humanas, es indispensable que el futuro profesional
cuente con los conocimientos de las ciencias como la epistemología, las
ciencias de la educación y las ciencias teológicas, a través de los cuales
alcanzará a comprender el proceso formativo del ser humano y los procesos educativos de diferente
índole, elementos claves para una mejor comprensión del proceso enseñanza - aprendizaje.
Se requiere que el futuro profesional cuente con elementos
teóricos suficientes para comprender los procesos psicológicos, sociológicos,
culturales de los sujetos, familias y colectivos objeto de formación. El
estudiante de Licenciatura en Educación Religiosa Escolar debe entonces llegar
a la comprensión de que lo pedagógico siempre está presente en cualquier
acercamiento a los individuos para formar, educar, evaluar o instruir; implica
conocer su proceso de desarrollo, el modo como se ha vivido y los efectos que
este produce en la evolución y vivencia de la formación, o también cómo en
ocasiones lo didáctico está hablando de algo pedagógico. Además, el estudiante
alcanza a comprender las relaciones entre la educación y los procesos sociales,
el trabajo en equipo desde la compresión de los fenómenos interrelacionales.
A través de estos conocimientos, el futuro profesional
logrará asumir el proceso educativo con una mirada crítica e interpretativa de
las problemáticas sociales, los procesos culturales, las creencias, los hábitos
y las costumbres de los usuarios, lo que le permitirá ofrecer alternativas
responsables y científicas.
El conocimiento propio de la docencia implica que la
formación de éste profesional se oriente de forma integral y con un desarrollo
conceptual propio que fortalezca la disciplina. Como pilares fundamentales de
este proceso de formación está el proceso y la gestión educativa, no sólo a
individuos y colectivos sino también a la familia mediada por la investigación
en sus diferentes enfoques.
La formación integral del educando es la razón de ser de la
docencia, definido como el proceso de «enseñar a pensar»; «enseñar a aprender»;
«enseñar a ser y estar». Esto implica el desarrollo de diversas estrategias,
que incluyen el fomento de la creatividad, el sentido de responsabilidad, el
fomento de la independencia en la búsqueda del conocimiento, la incentivación
de un acercamiento interdisciplinario hacia el saber y la posibilidad del
desarrollo de las aspiraciones individuales. Asimismo, con la flexibilidad
curricular se propone que los estudiantes vayan incorporando al proceso
formativo aquellos elementos que emergen del contexto, de la religión y de la
pedagogía, y que se deben constituir en objetos de estudio e investigación; al
mismo tiempo, combinar las actividades de orden académico con otras que
favorezcan el desarrollo pleno de las competencias en el ser, el saber, el
hacer, el convivir, el emprender y el
desaprender; es decir que le permitan
formarse integralmente, aprendiendo a cumplir un reglamento, aprendiendo a
ganar, a perder, a competir, a ser tolerante, a trabajar en grupo, a resolver
conflictos.
Para
hacer esta mirada prospectiva sobre la estructura o propuesta formativa bajo la
cual se deben formar y cualificar las futuras generaciones de maestros, es
importante recordar que la Constitución Política de 1991 reconoce la educación
de calidad como un derecho fundamental de todos los niños, niñas y adolescentes
(artículos 44, 45, 65, 67); igualmente, en el artículo 67, se dice que es
responsabilidad del Estado ejercer funciones de supervisión, inspección y
vigilancia, para garantizar que la prestación del servicio educativo se haga
bajo estándares de calidad; respecto de la calidad docente, señala la necesidad
de garantizar la idoneidad de los educadores (artículo 68). Es decir que es
función estatal velar por la calidad educativa y por la calidad en la formación
docente
A
través de la Ley General de Educación (Ley 115 de 1994) se reglamentan estos
aspectos señalados por la Constitución; estableciendo los parámetros bajo los
cuales se organiza el sistema educativo, señala los objetivos educativos por
nivel, reconoce la importancia de la formación de educadores para garantizar la
calidad de la educación y reconoce la importancia de la práctica docente dentro
de la misma formación.
Estos
dos soportes legales, junto con el Decreto 1075 de 2015 y el Decreto 2450 del
17 de diciembre de 2015, soportan la necesidad de reglamentar la oferta de
programas profesionales que garanticen la idoneidad personal, pedagógica,
investigativa y disciplinar de las personas que tendrán la responsabilidad de
formar y educar las futuras generaciones de colombianos, y que atienda las
particularidades que le atañen a la cualificación y desarrollo de los
profesionales de la educación.
Para cumplir con este propósito, se distribuyen los espacios
de conceptualización en componentes de formación de la siguiente forma, dando
cumplimiento a la Resolución 02041 de
2016, “la institución de educación superior deberá organizar los
programas de Licenciatura con el fin de formar en valores, conocimientos y
competencias profesionales del educador, y en la utilización de buenas
prácticas en la enseñanza de las disciplinas a su cargo, en los niveles educativos
para los cuales se está formando. Los valores, conocimientos y competencias del
educador comprenderán los siguientes cuatro componentes, que deben ser
desarrollados conjuntamente, asegurando su articulación: 1. Componente de
fundamentos generales; 2. Componente de saberes específicos y disciplinares; 3.
Componente de pedagogía y ciencias de la educación, y 4. Componente de
didáctica de las disciplinas” (pág. 4).
1.1.2
Las Competencias
Tal como se expone en la Resolución 02041 de 2016, cada uno
de estos componentes debe facilitar el desarrollo de competencias en el orden
de:
- Componente
de fundamentos generales: este componente incluye competencias generales,
como: comunicativas en español, manejo de lectura, escritura y argumentación;
matemáticas y de razonamiento cuantitativo; científicas; ciudadanas; en el uso
de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC), y comunicativas
en inglés.
- Componente
de saberes específicos y disciplinares: para posibilitar en el futuro
Licenciado en Educación Religiosa Escolar el dominio de los saberes y
conocimientos actualizados de los fundamentos conceptuales y disciplinares del
campo o el área en que se desempeñará como licenciado. Adicionalmente, se favorece
el desarrollo de competencias investigativas, innovadoras y de profundización
en el conocimiento de dichos fundamentos, lo cual involucra el despliegue de
capacidades en el orden de: apropiación de la trayectoria histórica y los
fundamentos epistemológicos del campo pedagógico y disciplinar (antropológico,
bíblico, cristológico y eclesiológico), el dominio de los referentes y formas
de investigación del campo disciplinar o profesional, y las actitudes y disposiciones frente al trabajo
académico y la formación permanente.
- Componente
de pedagogía y ciencias de la educación: referido a la capacidad de
utilizar conocimientos pedagógicos y de las ciencias de la educación que
permitan crear ambientes para la formación integral y el aprendizaje de los
estudiantes. Desde este componente se potencializa el desarrollo de
competencias, como: dominio de las tradiciones y tendencias pedagógicas y
didácticas; la lectura de textos, contextos y sujetos; la valoración de los
estilos cognitivos y ritmos de aprendizaje de los escolares; la
re-significación de las prácticas educativas situadas en contexto; la vivencia
de la evaluación como un proceso comprensivo y como una oportunidad para la
mejora continua, desde los aprendizajes personales e institucionales.
- Componente
de didáctica de las disciplinas: para el reconocimiento de la articulación
entre la pedagogía y la didáctica como fundamentos del quehacer del educador. Desde
este componente se acerca al futuro licenciado a las posibilidades de
didactización de la disciplina que va a enseñar, para el caso particular las
Ciencias Religiosas; reconociendo, valorando y aplicando los métodos, las
metodologías y las estrategias didácticas que se encuentre más acordes con las
formas particulares que tiene los estudiantes para aprender y para acercarse al
objeto de estudio de la religión como hecho cultural. Ahora bien, desde este componente también se
presentan a los estudiantes nuevos ambientes, problemáticas y experiencias
significativas que le permiten al escolar avanzar en el desarrollo de la
dimensión religiosa.
Luego de este recorrido por componentes
de formación, se puede inferir que la propuesta no se aleja o no es contraria a
las disposiciones establecidas por el Ministerio de Educación (2014) en la
propuesta de Lineamientos de Calidad
para las Licenciaturas en Educación (Programas de Formación Inicial de
Maestros). Así las cosas, existe
una correspondencia con las competencias básicas y fundamentales que debe
poseer y demostrar un licenciado en educación. Según este documento, las tres
competencias básicas son: enseñar, formar y evaluar (pp.7 – 8). Desde el enseñar, el futuro licenciado debe
demostrar capacidad para comprender, formular y usar la didáctica de las
disciplinas con el propósito de favorecer los aprendizajes de los estudiantes y
con ellos el desarrollo de las competencias propias del perfil profesional. Lo
anterior involucra aspectos, como: uso de la didáctica de las generales y
específicas, diseño meso y microcurricular, promoción de actividades que
favorezcan el desarrollo conceptual, actitudinal y procedimental de los
estudiantes.
Las competencias en el formar, le
exige al licenciado re-conceptualizar y utilizar conocimientos pedagógicos que
permitan crear ambientes educativos para el desarrollo de los estudiantes, del
docente y de la comunidad. En este orden de ideas, será necesario que demuestre
capacidad para crear ambientes educativos que generen el desarrollo de la
comunidad educadora, comprender las características (potencialidades y
particularidades) de los estudiantes, entender la importancia del desarrollo
cultural de los estudiantes, comprender los procesos propios de desarrollo profesional
y buscar mejoramiento continuo, vincular las prácticas educativas a los
procesos de desarrollo social y comunitario.
Desde
las competencias evaluativas, el
docente debe poseer y demostrar capacidad para reflexionar, hacer
seguimiento y tomar decisiones sobre los procesos de formación, con el
propósito de favorecer la autorregulación y de plantear acciones de mejora en
la enseñanza, en el aprendizaje y en el currículo. Lo anterior se concreta a
través del conocimiento de diversas alternativas para evaluar, la comprensión
del impacto que posee la evaluación sobre el aprendizaje y el desarrollo
institucional, comprender la relevancia de la autorregulación en los sujetos de
la educación.
En la Resolución 02041 de 2016, sobre las condiciones de calidad
de los programas de licenciatura en el marco de las condiciones para obtener el
registro calificado, cobra particular importancia el lugar que la práctica
pedagógica debe tener en los planes de formación de los futuros licenciados. Es
así como se plantea condiciones para que la práctica pedagógica sea el elemento
central de los programas de licenciatura. Esto implica establecer condiciones
para asegurar que a la práctica pedagógica corresponda como mínimo, a cincuenta
(50) créditos presenciales del programa a lo largo de la carrera, garantizando
que su inicio sea antes de que el estudiante complete los primeros cincuenta
(50) créditos del programa de Licenciatura, además de la incorporación de la
práctica pedagógica en el plan de estudios debe aumentar a medida que los
estudiantes avanzan en su carrera, hasta llegar a la práctica docente en el
aula en los períodos finales de la misma.
Consecuentes con el artículo 2, numeral 1 y 2, de la
Resolución 02041 de 1016, donde se hacen especificaciones sobre la denominación
del programa y el componente de saberes específicos y disciplinares. que favorece en el educador el dominio de los
saberes y conocimientos actualizados de los fundamentos conceptuales y
disciplinares del campo o el área en que se desempeñará como licenciado, y la
capacidad para investigar, innovar y profundizar de forma autónoma en el
conocimiento de dichos fundamentos; el
maestro de Educación Religiosa Escolar debe poseer una capacitación en las
ciencias de la educación y en las humanas que estudian el hecho religioso, y
sus manifestaciones culturales, y dado
que la enseñanza de la educación religiosa escolar presenta la racionalidad
específica del pensamiento cristiano, la
dimensión intelectual objetiva, fundamentada y metódica, la misma que ha hecho
posible la teología como ciencia (Betancur Jiménez, Álvaro, 2010, pág. 38); los
fundamentos de la
formación de los licenciados en el marco
disciplinar de la teología se presentan desde el área de formación básica y
desde el área de formación profesional.
En la formación básica se incluye los
elementos necesarios para la comprensión del campo de la teología, tanto en el
contexto teórico y metodológico del campo como en el contexto histórico-social
de la formación y del ejercicio profesional posible. Se abarcan los principios
teóricos y metodológicos de las humanidades y de la teología en particular, la
aproximación histórica y los aportes interdisciplinarios necesarios para la
comprensión de los problemas teológicos (fundamentación); y los conocimientos
relativos al contexto histórico-social y cultural en el cual se formulan y
desarrollan los problemas de la teología, el contexto de la práctica
disciplinaria posible de los egresados y el contexto institucional de la
formación de los educadores religiosos (contextualización).
Desde
la formación profesional se asegura la apropiación de las herramientas teóricas
y metodológicas propias del campo de la teología y ofrece a los estudiantes la
posibilidad de elegir énfasis o adelantar estudios de profundización en un
campo posible de la teología o de ampliar coherentemente la perspectiva de la
acción profesional. Dando cuenta de
estructuras como la teología dogmática y sistemática, teología bíblica, antiguo
y nuevo testamento, historia, ética o moral, pastoral, liturgia y misionología
(formación disciplinar); y los conocimientos requeridos para la formulación de
proyectos académicos rigurosos de carácter disciplinario o interdisciplinario
(profundización o complementación).
El
componente de formación disciplinar se encuentra articulada a los Estándares
para la Educación Religiosa Escolar (Conferencia Episcopal de Colombia, 2004).
En esta lógica la organización de este componente da respuesta a los enfoques:
antropológico, bíblico, cristológico, y eclesiológico.
- Enfoque antropológico: aborda
los problemas y temas desde la perspectiva de búsqueda de su sentido y valor en
la sociedad y la cultura actual, es decir, se plantea la situaciones y
problemáticas en el mundo actual, y los análisis y sentidos que se aportan
desde los ámbitos éticos, filosóficos, teológicos y religiosos no cristianos.
- Enfoque bíblico: se abordan los
problemas y temas desde la perspectiva de la Divina Revelación, en su etapa del
Antiguo Testamento. Se explora la historia bíblica antes de Cristo, la
experiencia religiosa de Israel y su preparación a la plenitud en la
Revelación.
- Enfoque Cristológico: se abordan
las problemáticas y temas desde la perspectiva de la Divina Revelación, en su
etapa del Nuevo Testamento, centrado en Cristo y en la experiencia de los
apóstoles y primero cristianos. Este es el centro hacia el cual convergen todos
los temas y problemas de la educación religiosa escolar.
- Enfoque eclesiológico: aborda
los temas y problemas desde la perspectiva de la historia posbíblica, esto es,
desde la tradición de la iglesia, del cristianismo vivido y de su misión,
presencia y acción en el mundo de hoy. Se abre el espacio para presentar la
perspectiva ecuménica, es decir, de las convicciones de las iglesias, que se
reconocen mutuamente cristianas.
“La institución de educación
diseñará sus currículos de los programas de Licenciatura asegurando que sus
egresados, una vez estén en el ejercicio de su profesión como licenciados,
tengan la capacidad de garantizar la pertinencia y el logro de los procesos
educativos a partir de la apropiación de los Estándares Básicos de
Competencias, lineamientos curriculares y referentes de calidad, con el fin de
fortalecer los procesos de aprendizaje de los estudiantes. Para esto, el
programa debe incluir formación en pedagogía, didáctica de los saberes
escolares, formación disciplinar e investigativa tanto pedagógica como en el
saber específico” (Resolución 02041, 2016, Artículo 2, numeral 2).
Lo anterior implica, al decir de Rafael Artacho López
(2009), que la formación por competencias implica un aprendizaje a lo algo de
la vida; pues, por una parte, el conocimiento es dinámico y, por otra, y las
capacidades deben ser adaptadas a contextualizadas con el desarrollo de la
profesión (pág. 28). Las competencias l deben llevar al maestro a apropiar la
disciplina que desea enseñar; a abordar las problemáticas del conocimiento, de
los contextos y de los sujetos, de manera innovadora y creativa; pero también
le deben capacitar para plantear nuevas cuestiones que aporten al desarrollo
del saber pedagógico, didáctico, evaluativo y disciplinar.
Tabla 12. Competencias para el programa
COMPETENCIAS
|
DESCRIPCIÓN
|
Competencias
Generales
|
Participa, con eficiencia y destreza,
en todas las esferas de la comunicación y la sociedad humana, a través del
desarrollo de las habilidades para hablar, escuchar, leer y escribir;
desenvolviéndose en la cultura y la sociedad, desde el ejercicio auténtico de
la producción discursiva, la interacción comunicativa y la argumentación.
Se desempeña adecuadamente en
contextos cotidianos que involucran información de carácter cuantitativo,
desde la comprensión, diseño y correcta aplicación de métodos, procedimientos
y argumentos fundamentados en contenidos matemáticos genéricos; acercándose a
la resolución de problemas de manera pertinente.
Reflexiona, analiza y asume posición
crítica frente a los acontecimientos y fenómenos dados, a partir del
planteamiento de interrogantes, de representaciones y modelos científicos;
buscando, organizando e interpretando información relevante que dé respuesta
a preguntas y problemáticas concretas.
Utilizar las TIC para fortalecer los
procesos de enseñanza y aprendizaje, reconociendo alcances y limitaciones de
la incorporación de estas tecnologías en la formación integral de los
estudiantes y en su propio desarrollo profesional; desde el uso y
reconocimiento pertinente, responsable y eficiente de las herramientas
tecnológicas.
Participa,
en su calidad de ciudadano, de manera constructiva y activa en la sociedad;
desde el conocimiento situado del entorno social y político, reconociendo sus
derechos y deberes, y buscando el bienestar colectivo.
Se
comunica efectivamente en inglés, según el Marco Común Europeo; dando cuenta
de la comprensión textual e intertextual, desde la producción de textos
sencillos y coherentes sobre temas de interés general; así como desde la
expresión de ideas, pensamientos, imaginarios y visiones de índole personal.
|
Competencias
específicas y disciplinares
|
Aplica los fundamentos
epistemológicos y científicos de la pedagogía y de las ciencias religiosas;
resolviendo los problemas escolares de manera pertinente y abordando las
experiencias religiosas desde el respeto y tolerancia ecuménica.
Aborda los objetos de estudio propios
de la pedagogía y las ciencias religiosas, a través de los paradigmas y
métodos investigativos propios de los campos disciplinares; realizando
aportes significativos a la formación y dimensión religiosa del hombre.
Demuestra actitudes y disposiciones
frente al trabajo académico y la formación permanente; aplicando los
conocimientos y saberes adquiridos durante el proceso formativo, según las
particularidades y dinámicas del contexto escolar y de los actores educativos
|
Competencias
pedagógicas y educativas
|
Analiza
las características físicas, intele4ctuales y sociales de los estudiantes,
desde el reconocimiento de las diferencias culturales y cognitivas; lo que le
permite planificar procesos educativos y de interacción social consecuentes
con las potencialidades y necesidades de los escolares.
Asume el
desarrollo cultural de los estudiantes, con el diseño de propuestas
formativas socio-interaccionistas; en el marco de las políticas públicas
educativas.
Sistematiza
la práctica pedagógica, consolidando dinámicas reflexivas, intelectuales e
investigativas que favorecen su cualificación profesional y la innovación
escolar.
Articula
las prácticas educativas con el reconocimiento de la institución educativa
como centro de desarrollo social y cultural; realizando vinculaciones
concretas entre el PEI, el Modelo Pedagógico y las políticas educativas.
Aplica
diversos métodos, técnicas y estrategias flexibles para evaluar los aprendizajes,
haciendo seguimiento a los procesos formativos y al logro de los objetivos de
enseñanza y de aprendizaje.
Valora el
impacto de la evaluación en la adquisición de aprendizajes significativos;
analizando y apropiando la metaevaluación con el propósito de resignificar el
currículo y alcanzar las metas educativas.
Asume la
evaluación como una experiencia ética que aporta a la calidad del sistema
educativo y que favorece la autorregulación institucional y de los
individuos.
|
Competencias
didácticas
|
Diseña
metodologías didácticas consecuentes con los estilos cognitivos y los ritmos
de aprendizaje de los estudiantes; con el propósito de generar experiencias
religiosas significativas y comprensiones del fenómeno religioso cultural.
Diseña
proyectos curriculares, planes de estudio y unidades didácticas para la
enseñanza de la educación religiosa escolar, que se articulan a los
estándares básicos por competencias y a los objetos de estudio propios de la
disciplina.
Promueve
procesos de enseñanza y aprendizaje de la educación religiosa que favorecen
el desarrollo del ser, el conocer, el hacer, el saber, el aprender, el
convivir y el emprender de los individuos.
|
1.1.3
Perfiles de Formación Profesional
La formación
integral es el gran propósito de la Comunidad Educativa de la Facultad de
Ciencias de la Educación de la Universidad Católica de Oriente, esta se torna
en su gran meta asumida no como punto final de su proceso educativo sino como
punto de referencia u orientación teleológica.
Los programas adscritos a la Facultad de Ciencias de la
Educación comparten las concepciones en que se asienta la propuesta de
formación, como puede apreciarse a continuación.
Ser humano:
es toda persona que hace parte de nuestro programa, con sus diferentes roles y
las maneras de participar en el desarrollo de los procesos académicos; esto
parte de admitir que las personas somos simultáneamente parte del programa
académico, de la universidad, la sociedad que está afuera y los restantes
grupos de interacción social y cultural. Por eso, compartimos la actual
perspectiva de desarrollo humano, propuesta por Martha Nussbaum, centrada en
las capacidades y la mirada de la agencia de libertades, formulada por Amartya
Sen; ambas, se revierten en el desarrollo humano y social. En este sentido, y
sin riesgo de contradicción, la concepción de ser humano asumida desde la
Facultad es correspondiente con la propuesta antropológica transcendental de la
Universidad; lo que implica asumirlo como un ser único, total y abierto al
mundo, a los demás hombres y a la trascendencia; un hombre cuya identidad se
establece mediante un conjunto de relaciones y de interacciones, de las que
surge como sujeto para proyectarse y transformar la realidad como un ser
integral.
Desarrollo social: es el desarrollo de las personas integrado a
una propuesta que nos ubica frente a la posibilidad de desplegar las
potencialidades individuales y colectivas de los sujetos para superar una
realidad humana actual, llevándoles a niveles superiores de perfeccionamiento y
de calidad de vida. Por eso, aunque el predominio de modelos existentes
pretende hacer recaer el desarrollo en cuestiones económicas por ejemplo,
apostamos a las contribuciones de la Universidad para el desarrollo de la
región, porque la verdadera riqueza de
una nación está en su gente; aquí la importancia de preguntarse con
frecuencia, en cada ámbito y sector de la vida social, “¿qué son las personas
capaces de hacer y de ser?”.
Para ello es necesario vivir permanentemente la triangulación entre el
desarrollo socio-afectivo, el desarrollo de las inteligencias (potencialidades)
y del aprendizaje, y el desarrollo de las competencias.
Competencia: Conjunto de habilidades, actitudes, destrezas,
aptitudes alusivas a la realización de una tarea. Esta mirada implica que “(…)
el punto de partida de la reflexión didáctica se sitúa al lado de las
situaciones sociales de movilización de lo que se ha adquirido en la escuela.
Los objetivos de formación ya no se describen en términos de conocimientos sino
en términos de actividades, de tareas que el alumno deberá poder enfrentar”.
A partir del sistema de créditos en educación superior, es acentuado el trabajo
por competencias, enfático en las actividades de quien aprende y en ejercicios
de autorregulación. En nuestra concepción, presentamos las competencias en
bloques encabezados por acciones realizables por cada estudiante para su
consecuente desarrollo y alcance, esto admite la diversidad y los ritmos
diferenciales. La expresión de competencias es en logros o desempeños, y éstos,
se revelan en la evaluación; pero van más allá, pues realmente los maestros
demuestran el nivel de competencia adquirido en los espacios concretos del
ejercicio profesional.
Evaluación: es la valoración, el juzgamiento y la apreciación
continuas, inherente al proceso de formación, acorde al concepto de
competencias, de ser humano y de desarrollo social; en este sentido la
evaluación es una oportunidad para la mejora continua y una expresión de las
relaciones – experiencias construidos entre el docente, el estudiante y el
conocimiento. El camino ondulado recorrido por cada ser humano en su proceso de
formación, le sitúa durante el proceso en diferentes picos que se convierten en
logros de los componentes de la competencia. Es materializada a través de las
estrategias heteroevaluación, coevaluación y autoevaluación, a su vez,
expresadas en cantidades numéricas ajustadas a lo propuesto en la normativa
vigente.
En correspondencia con lo anterior, se pueden establecer las
siguientes competencias básicas y diferenciadoras del perfil de los estudiantes
egresados de la Facultad de Ciencias de la Educación.
- Gestión académica, comunitaria y administrativa
del proceso enseñanza - aprendizaje, de acuerdo con principios éticos, morales
e investigativos propios de la disciplina, la pedagógica y la didáctica; para
la formación y el desarrollo situado en contexto, conforme al rol y las
funciones docentes.
- Afrontamiento de los cambios, retos, desafíos y
transformaciones que el contexto y el Sistema Educativo imponen al Licenciado
en Educación Religiosa Escolar, a partir de la fundamentación disciplinar e investigativa, el reconocimiento de condiciones y
potencialidades de las comunidades y de la región y la búsqueda de alternativas
para la transformación de las mismas.
- Promoción y fortalecimiento de los procesos de
pensamiento, el desarrollo de capacidades y el ejercicio de la libertad
responsable en la sociedad en general y en la vida personal.
- Lectura, compresión y deconstrucción de los
contextos, haciendo de las adversidades o necesidades una oportunidad para para
la participación, potenciación y transformación de los aprendizajes a lo largo
de la vida social e individual.
1.1.3.1
Perfil Profesional
La formación integral se propone como meta desde el ámbito
del desarrollo integral, para lograr un perfil de nuestros estudiantes
complementario en sus dimensiones, en las relaciones con distintos entornos, en
la producción y divulgación del conocimiento y las transformaciones humanas
individuales y colectivas. Aún, hablando de integral, para hacerlo
comprensible, son desagregados los siguientes aspectos:
1.1.3.1.1
Perfil humano y social
El
primero hace referencia al SER de todos los (as) estudiantes “para que florezca
mejor la propia personalidad y se esté en condiciones de obrar con creciente
capacidad de autonomía, de juicio crítico y de responsabilidad personal y
social. Por eso se deben cultivar todas las posibilidades personales: memoria,
razonamiento, sentido estético, capacidades físicas, competencias
comunicativas, entre otras” (DELORS Jacques. 1997, p. 97). El segundo, se refiere al “aprender a
vivir juntos desarrollando la compresión del otro y la percepción de las formas
de interdependencia - realizar proyectos comunes y preparar para solucionar
inteligentemente los conflictos- respetando los valores del pluralismo,
compresión mutua y paz” (Jacques Delors. 1997, p. 104)
- Líder de procesos educativos dentro y fuera de
la comunidad, en búsqueda de soluciones que transformen condiciones
desfavorables de la calidad de la vida y propendan por la dignidad y la
emancipación de los otros y propia.
- Defensor de la dignidad humana, el respeto y
aceptación de la diferencia; desde los postulados de la alteridad y la
construcción de relaciones sociales incluyentes
- Promotor de expresiones democráticas, basadas en
principios estéticos, políticos, éticos y morales, aportantes a la convivencia
comunitaria, a la armonía con el entorno y a transformaciones sociales.
- Gestor de propuestas de intervención pastoral y
social consecuentes con las nuevas tendencias de la evangelización.
- Defensor del respeto por la diferencia y las
condiciones de alteridad que se dan en las relaciones sociales; con la
promoción la valoración de la dignidad humana y el acatamiento de las normas
básicas para vivir en comunidad.
1.1.3.1.2
Perfil académico
Es el “aprender a conocer combinando una
cultura general suficientemente amplia con la posibilidad de profundizar los
conocimientos en un pequeño número de asignaturas. Lo que supone además
aprender a aprender para poder aprovechar las posibilidades que ofrece la
educación a lo largo de la vida” (Jacques Delors. 1997, p. 110)
- Creativo, critico, proactivo en la indagación y
problematización sobre las nuevas dinámicas del conocimiento científico;
expresado en el despliegue de capacidades humanas, en hechos, conceptos,
principios, teorías y leyes que fundamentan la pedagogía y las ciencias
(humanísticas, naturales)
- Constructor de saber escolar desde la reflexión
pedagógica y la práctica educativa, fundamentada desde acciones curriculares,
didácticas y evaluativas que son propias de la estructura epistemológica y
metodológica propias de su saber fundante.
- Re-significa y contextualiza las estructuras que
definen la propuesta pedagógica de la Facultad con un sentido formativo, según
las tendencias contemporáneas, las exigencias y retos del contexto cultural
donde debe actuar.
- Intelectual de la pedagogía que se atreve a
cuestionar o interpelar las políticas educativas, las dinámicas sociales y las
estructuras institucionales, a partir de la reflexión de su práctica educativa
1.1.3.1.3
Perfil Operativo y Disciplinar
Referido
al “aprender a hacer a fin de adquirir no solo una calificación, sino, más
generalmente, una competencia que capacite a las personas para hacer frente a
gran número de situaciones y a trabajar en equipo. Pero, también, aprender a
hacer en el marco de las distintas experiencias sociales o de trabajo que se
ofrecen a los jóvenes y adolescentes, bien espontáneamente a causa del contexto
social o nacional, bien formalmente gracias al desarrollo de la enseñanza por
alternancia” (Jacques Delors. 1997, p. 99)
- Investigador de las realidades sociales,
culturales, políticas, económicas y educativas locales, regionales y nacionales
que intervienen en la aprehensión significativa de los saberes
- Mediador en procesos educativos soportados en la
investigación y proyección social propia del área de Educación Religiosa
Escolar
- Educador que apropia el saber antropológico,
bíblico, cristológico y eclesiológico, aplicándolo en la resolución de
problemas o entornos educativos formales e informales.
- Emprendedor de propuestas formativas flexibles e
innovadoras correspondientes con el enriquecimiento pedagógico, curricular,
disciplinar y científico, para la contribución a las transformaciones
educativas con calidad, pertinencia y relevancia.
1.1.3.2
Perfil Ocupacional
Campos
de desempeño de egresados (as) del Programa de Licenciatura en Educación
Religiosa Escolar.
- Educación
formal: docencia en el área de Educación Religiosa Escolar; administración y dirección de instituciones y
centros educativos (educación básica primaria, básica secundaria, media,
técnica, tecnológica, superior y posgraduada)
- Educación
para el trabajo y el desarrollo humano: docencia, orientación, coordinación y
fomento de procesos sociales (comunitarios), emprendimiento, desarrollo y
creación de instituciones educativas, enseñanza personalizada, etc.
- Investigación:
diseño, desarrollo y evaluación de proyectos investigativos (educativos,
pedagógicos, sociales); promoción y desarrollo de innovaciones en el campo de
la enseñanza y didáctización general y específica, la pedagogía, el currículo
de Educación Religiosa Escolar, etc.; científico social y educativo
Tabla 13. Plan general de estudios representados en
créditos
ASIGNATURA
|
Obligatorio
|
Electivo
|
Optativo
|
Institucional
|
Créditos académicos
|
Horas de trabajo académico
|
Componentes
(Resolución 2041)
|
Número máximo de estudiantes matriculados o proyectados
|
Horas de trabajo directo
|
Horas de trabajo independiente
|
Horas de trabajo totales
|
Fundamentos generales
|
Saberes específicos y disciplinares
|
Pedagogía y ciencias de la educación
|
Didáctica de las disciplinas
|
Semestre
1
|
Inglés I
|
X
|
|
|
|
1
|
32
|
16
|
48
|
X
|
|
|
|
20
|
Comunicación Oral y Escrita 1
|
|
|
|
X
|
1
|
16
|
32
|
48
|
X
|
|
|
|
30
|
Educación y Sociedad del Conocimiento
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
X
|
|
|
|
30
|
Psicología y Desarrollo Educativo I
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
|
|
X
|
|
30
|
Antropología Teológica
|
X
|
|
|
|
3
|
48
|
96
|
144
|
|
X
|
|
|
|
Visión Panorámica de las Sagradas E.
|
X
|
|
|
|
3
|
48
|
96
|
144
|
|
X
|
|
|
|
Revelación e Historia de la Salvación
|
X
|
|
|
|
3
|
48
|
96
|
144
|
|
X
|
|
|
|
Totales Semestre 1
|
|
|
|
|
15
|
256
|
464
|
720
|
|
|
|
|
|
Semestre
2
|
Inglés II
|
X
|
|
|
|
1
|
32
|
16
|
48
|
X
|
|
|
|
20
|
Electivo 1
|
|
X
|
|
|
1
|
16
|
32
|
48
|
X
|
|
|
|
30
|
Seminario Educación y Derechos Humanos
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
X
|
|
|
|
30
|
Antropología Pedagógica
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
|
|
X
|
|
30
|
Psicología y Desarrollo Educativo II
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
|
|
X
|
|
30
|
Hecho Religioso
|
X
|
|
|
|
3
|
48
|
96
|
144
|
|
X
|
|
|
|
Antiguo Testamento
|
X
|
|
|
|
3
|
48
|
96
|
144
|
|
X
|
|
|
|
Misterio de Dios Uno y Trino
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
|
X
|
|
|
|
Totales Semestre 2
|
|
|
|
|
16
|
272
|
496
|
768
|
|
|
|
|
|
Semestre
3
|
Ingles III
|
X
|
|
|
|
1
|
32
|
16
|
48
|
X
|
|
|
|
20
|
Eco antropología
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
X
|
|
|
|
30
|
Psicología y Desarrollo Educativo III
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
|
|
X
|
|
30
|
Epistemología de la pedagogía
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
|
|
X
|
|
30
|
Didáctica General
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
|
|
|
X
|
30
|
Fenomenología de la Religión
|
X
|
|
|
|
3
|
48
|
96
|
144
|
|
X
|
|
|
|
Nuevo Testamento
|
X
|
|
|
|
3
|
48
|
96
|
144
|
|
X
|
|
|
|
Teodicea
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
|
X
|
|
|
|
Totales Semestre 3
|
|
|
|
|
17
|
288
|
528
|
816
|
|
|
|
|
|
Semestre
4
|
Ingles IV
|
X
|
|
|
|
1
|
32
|
16
|
48
|
X
|
|
|
|
20
|
Cristología
|
|
|
|
X
|
1
|
16
|
32
|
48
|
X
|
|
|
|
30
|
Pedagogía Clásica
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
|
|
X
|
|
30
|
Práctica Pedagógica I (Observación)
|
X
|
|
|
|
3
|
48
|
96
|
144
|
|
|
X
|
|
25
|
Neuropsicología
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
|
|
X
|
|
30
|
Historia – Teoría y Gestión Curricular
|
X
|
|
|
|
3
|
48
|
96
|
144
|
|
|
|
X
|
30
|
Historia Comparada de las Religiones
|
X
|
|
|
|
3
|
48
|
96
|
144
|
|
X
|
|
|
|
Cristología
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
|
X
|
|
|
|
Totales Semestre 4
|
|
|
|
|
17
|
288
|
528
|
816
|
|
|
|
|
|
Semestre
5
|
Ingles V
|
X
|
|
|
|
1
|
16
|
32
|
48
|
X
|
|
|
|
20
|
Ética General y Profesional
|
|
|
|
X
|
2
|
32
|
64
|
96
|
X
|
|
|
|
30
|
Pedagogía Moderna
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
|
|
X
|
|
30
|
Teorías de la Organización Escolar
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
|
|
X
|
|
30
|
Psicopedagogía y Orientación Escolar
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
|
|
X
|
|
30
|
Historia – Teorías y Gestión de la
Evaluación Escolar
|
X
|
|
|
|
3
|
48
|
96
|
144
|
|
|
|
X
|
30
|
Historia de la Iglesia
|
X
|
|
|
|
3
|
48
|
96
|
144
|
|
X
|
|
|
|
Teología Moral
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
|
X
|
|
|
|
Totales Semestre 5
|
|
|
|
|
17
|
272
|
544
|
816
|
|
|
|
|
|
Semestre
6
|
Ingles VI
|
X
|
|
|
|
1
|
16
|
32
|
48
|
X
|
|
|
|
20
|
Familia
|
|
|
|
X
|
2
|
32
|
64
|
96
|
X
|
|
|
|
30
|
Pedagogía Contemporánea
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
|
|
X
|
|
30
|
Investigación Educativa I
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
|
|
X
|
|
20
|
Práctica Pedagógica II (Exploración)
|
X
|
|
|
|
5
|
80
|
160
|
240
|
|
|
X
|
|
25
|
Didáctica de la ERE
|
X
|
|
|
|
3
|
48
|
96
|
144
|
|
|
|
X
|
|
Eclesiología
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
|
X
|
|
|
|
Totales Semestre 6
|
|
|
|
|
17
|
272
|
544
|
816
|
|
|
|
|
|
Semestre 7
|
Ingles VII
|
X
|
|
|
|
1
|
16
|
32
|
48
|
X
|
|
|
|
20
|
Razonamiento Lógico Matemático
|
|
|
|
X
|
1
|
16
|
32
|
48
|
X
|
|
|
|
30
|
Investigación Educativa II
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
|
|
X
|
|
20
|
Práctica Pedagógica III
(Caracterización)
|
X
|
|
|
|
8
|
128
|
256
|
384
|
|
|
X
|
|
20
|
Otras educaciones
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
|
|
X
|
|
30
|
Optativo I
|
|
|
X
|
|
1
|
16
|
32
|
48
|
|
X
|
|
|
30
|
Doctrina Social de la Iglesia
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
|
X
|
|
|
|
Totales Semestre 7
|
|
|
|
|
17
|
272
|
544
|
816
|
|
|
|
|
|
Semestre 8
|
Ingles VIII
|
X
|
|
|
|
1
|
16
|
32
|
48
|
X
|
|
|
|
20
|
Electivo II
|
|
X
|
|
|
1
|
16
|
32
|
48
|
X
|
|
|
|
30
|
Investigación Educativa III
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
|
|
X
|
|
20
|
Práctica Pedagógica IV (Proyectos)
|
X
|
|
|
|
10
|
120
|
360
|
480
|
|
|
X
|
|
15
|
Sacramentos
|
X
|
|
|
|
3
|
48
|
96
|
144
|
|
X
|
|
|
|
Totales Semestre 8
|
|
|
|
|
17
|
232
|
584
|
816
|
|
|
|
|
|
Semestre 9
|
Investigación Educativa IV
|
X
|
|
|
|
3
|
36
|
108
|
144
|
|
|
X
|
|
20
|
Práctica Pedagógica V (Docencia)
|
X
|
|
|
|
10
|
120
|
360
|
480
|
|
|
X
|
|
15
|
Optativo II
|
|
|
X
|
|
1
|
16
|
32
|
48
|
|
X
|
|
|
30
|
Problemas Contemporáneos de la
Axiología
|
X
|
|
|
|
2
|
32
|
64
|
96
|
|
X
|
|
|
|
Totales Semestre 9
|
|
|
|
|
16
|
204
|
564
|
768
|
|
|
|
|
|
Semestre 10
|
Electivo III
|
|
X
|
|
|
1
|
16
|
32
|
48
|
X
|
|
|
|
30
|
Investigación Educativa V
|
X
|
|
|
|
3
|
36
|
108
|
144
|
|
|
X
|
|
20
|
Práctica Pedagógica VI (Docencia)
|
X
|
|
|
|
10
|
120
|
360
|
480
|
|
|
X
|
|
15
|
Optativo III
|
|
|
X
|
|
1
|
16
|
32
|
48
|
|
X
|
|
|
30
|
Totales Semestre 10
|
|
|
|
|
15
|
188
|
532
|
720
|
|
|
|
|
|
Total de número de horas
|
|
|
|
|
|
2.544
|
5.328
|
7.872
|
|
|
|
|
|
Total porcentaje de horas (%)
|
|
|
|
|
|
32.3%
|
67.7%
|
100%
|
|
|
|
|
|
Total número de créditos del programa
|
151
|
3
|
3
|
7
|
164
|
|
|
|
24
|
47
|
82
|
11
|
|
Total porcentaje de créditos (%)
|
92
|
2
|
2
|
4
|
100
|
|
|
|
14
|
29
|
50
|
7
|
|
Anexo 4. Microcurrículos
Tabla 14. Resumen de créditos
Ver normatividad asociada a registro
calificado. Decreto 2450 del 17 de diciembre de 2015 y la Resolución 02041
del 03 de febrero de 2016.
|
Total de créditos académicos del programa:
|
164
|
Créditos
Obligatorios
|
152
|
Crédito
Optativos
|
3
|
Créditos
Electivos
|
3
|
Créditos
Institucionales
|
6
|
No. de semanas período lectivo: *
|
16
|
|
|
No. de créditos por áreas y componentes de
formación *
|
Componente
de fundamentos generales
|
23
|
Componente
de saberes específicos y disciplinares
|
48
|
Componente
de pedagogía y ciencias de la educación
|
82
|
Componente
de didáctica de las disciplinas.
|
11
|
Tiene como requisito de grado la segunda
lengua *
|
SI X
|
NO
|
|
|
|
|
|
|